VOYEUR

«Nada como tomar una ducha caliente antes de ir a dormir».

La chica suspiró mientras el agua caliente se deslizaba sobre su piel. Tomó un poco de su champú con olor a lavanda y se masajeó el cuero cabelludo, tarareando una canción por lo bajo.

—Te veo.

El terror la paralizó al escuchar esa voz profunda. Abrió los ojos, esperando encontrar a un extraño tras el cristal de la ducha.

Pero no había nadie.

«¿Lo he imaginado?»

Lívida de terror, bajó la mirada. Sus ojos se clavaron en el desagüe, indefensa ante la risa siniestra que surgía desde las profundidades.